Bicicleta (2017)

[kingF]

Probadas ayer, en mi casa, con mi ex. Mitad de un cartón para mí, mitad para ella.
Última toma: 28 de Febrero - Un cuarto de NBOMe  (Gato Felix)
Peso 67 kilos, mido 1,77. Tolerancia baja-media.
Tomé media donald trump naranja el 30-3.
Nos acompañó una amiga la mayoría del viaje.
Por lo que pude averiguar más del blotter es Bicicleta 2014.
Tomamos a las 23:50. Sabor nulo, pero adormecía la lengua. Tardó mucho en pegar. A mi ex alrededor de una hora. A mí me empezó a pegar a la hora y media, y recién estuve bien ácido a las 2 de la mañana. Nos juntamos a cenar, yo por ahí comí bastante y mi ex un poco menos. Además ella es contextura flaca y de tolerancia baja.

Creo que eso es todo lo objetivo que puedo ser, y de acá en más todas mis vivencias. Hasta la 1:30 estaba convencido de que los cartones estaban viejos y nunca iban a levantar. Estas bicis las tengo desde octubre-noviembre de 2017. Antes de las 2:00 sentía disolución del ego, pero nada de visuales y era capaz de tener una conversación bastante fluida.
Sin embargo, de repente pegó. Y pegó intenso. Me acuerdo subir a la terraza con las chicas, ver toda la ciudad y ésta respiraba, era de colores, se movía y el cielo tenía todos los matices del azul y violeta. En todo lo que es blanco se apreciaban colores rosados bien intensos, los cyan, los verdes, los brillos y los fractales que parecen humito. Hasta acá todo bien característico del nbome. La música que escuchábamos me daba la sensación que venía de atrás mío o que si estiraba la mano para atrás, iba a tocar un parlante, cuando en realidad la música estaba viniendo de la tele, que estaba adelante. Las luces de los videos que veíamos en la tele (Orishas, re bizarro) las podía trasladar a la habitación. En particular en el video de "El kilo" hay un fondo azul y luces amarillas y de otros colores, que me daba la impresión de que así estaba el living también. Me pareció muchas veces a lo largo de la noche que era de día.
Honestamente, no pensé que iba a pegar tanto. Tomé medio cartón dos veces en mi vida, cuartitos más de la que puedo recordar, y un cartón entero una sola vez. Este medio cartón fue lo más intenso que tomé hasta ahora. Fueron 6 horas de viaje sin parar, demasiado y unas 8-12 hasta que bajé por completo. A lo último ya estaba un poco harto (pobre Albert el viaje que habrá tenido aquella vez). En un punto nos dimos cuenta de que había que descartar la idea de salir a bailar o encontrarnos con amigos, el viaje nos dejó derretidos al suelo por un rato largo. Cuando no estaba en los picos más ácidos del viaje, intentaba ser muy conciente de los efectos del cartón como los patrones que estaba viendo, las ondulaciones de las imágenes, qué colores predominaban y los hilos de ideas que me iban surgiendo, hasta que obviamente colgaba. No creo que haya podido estar más de un minuto entero en ese estado de "observación participante". Me alegra no ser tan drogadicte como para poder en pleno viaje hacer cosas como traer el colchón de la pieza al living, cortar una naranja para comerla, preparar mate, poner música sin problemas. Y por lo general cuando me concentro así no tardo mucho, ni cuelgo (esto dicho desde el punto de vista de alguien en pleno viaje, igual). Más allá de eso, por momentos era muy difícil comunicarse. Una leve ansiedad todo el tiempo, como que algo estaba por venir o que estábamos esperando "la actividad", cuando en realidad cada cosa que hacíamos era "la actividad". Ideas inconexas, lenguaje que no alcanza para explicar lo que estás sintiendo, incapacidad de poder terminar una idea. Comer es una actividad agotadora, entendés por qué los nenes tardan media hora para comer un pedacito de banana; es más un juego que una actividad cotidiana. A diferencia de otras veces, nunca sentí el estómago pesado, náuseas o alguna sensación incómoda; esto me hizo dudar bastante de qué sustancia estaba en el cartón. Tampoco me había pasado de ver que los ojos de la gente se les derritieran, como que se deslizaban desde su posición original hacia abajo, por la mejilla. Las caras se deformaron mucho, por momentos mi ex y mi amiga tenían rasgos bien felinos o de serpiente. La geometría de las cosas y personas bastante distorsionada. El frizz del pelo de ambas parecía un aura, y era de muchos colores. Cuando estaban acostadas en el sillón o en el colchón, parecían figuras salidas de una pintura maya o centroamericana. Además de los fractales que parecen humo, también vi ondulaciones, efectos de chapa ( / \ / \ / \ / \) como en líneas horizontales, vibraciones fuertes al ritmo de la música de arriba a abajo. 

Lo que amo de estos viajes es que son una fuente inagotable de inspiración artística. Anoche vi mil cuadros, escribí mil canciones, armé teorías e historias que yo pagaría por ver, leer y escuchar. Y lo que odio de estos viajes es que soy un inútil para crear cualquiera de esas cosas, así que quedarán perdidas por siempre en mi cabeza. Qué hermoso todo lo que vi, estoy muy agradecido.
Todos estos efectos duraron toda la noche. De a ratos las cosas se calmaban, y cuando pensé que ya había bajado bastante, de nuevo se le derretían los ojos a mi amiga. Por momentos sentí una desconexión muy grande con mi cuerpo (despersonalización), sentí que mis ojos eran una ventana o un video de la realidad y mi mente un punto en la habitación, como si alguien hubiese hecho zoom para atrás desde mi punto de vista, rarísimo. En un momento, mi ex puso una canción de cuando estábamos en pareja y sentí una conexión con su alma de manera muy profunda, también difícil de explicar. Quién iba a decir que medio cartón que al principio no pegaba iba a tener tanto para dar. Me acosté a las 8:30, después de poner orden en la casa, ya solo. No dormí nada y estoy cansado, pero pude comer y ya no hay más visuales, por suerte.

Ojalá todos pudieran pasar por esta experiencia alguna vez. Más tarde con una luz azul corroboré que el cartón no brilla, así que debe ser NBOMe. Este viaje me enseñó que tomar media pepa puede ser algo fuerte y que en otro setting me hubiera paronoiqueado o asustado un toque más. Es mucho mejor tomarlo de día y en situaciones controladas; en grupo y bien acompañado debe ser bellísimo.