Hola a todos
Dudaba de si hacer éste tema o no, pero la verdad no pierdo nada y me gustaría compartirlo. Básicamente voy a detallar mi primer y segunda experiencia consumiendo hongos alucinogenos.
Primero que nada quiero aclarar que para ambas experiencias consumí hongos de la misma cosecha, por lo que la diferencia entre ambos viajes es exclusivamente por el contexto y la cantidad consumida.
Primer Experiencia
Junto a dos amigos nos fuimos a Mar del Plata por el fin de semana, dos de nosotros llegamos el viernes a la mañana pero como el otro llegaba recién a la noche, quedamos en hacerlo al otro día que estabamos los tres en igualdad de condiciones.
Decidimos hacerlo el sábado al mediodía, en ayunas. Yo había consumido hongos en una ocasión, si bien esa vez no tuve ningun tipo de efecto, conocía a la perfección el sabor de mierda que tienen así que se nos ocurrió consumirlos con dulce de leche para pasar el mal sabor. Básicamente eran cucharadones de dulce de leche (La Serenisima Estilo Colonial, obvio) con pedazos de hongos en el medio, y tengo que reconocer que fue bastante digerible eh. Poco se puede hacer con la textura acartonada que tienen, pero en lo que respecta a sabor el dulce de leche lo tapa casi en un 90% asi que a los que estén leyendo se los recomiendo absolutamente.
Consumimos 2g de una aproximadamente a las 12:15 hs dentro del hotel, la idea era ir a la playa en lo que empezaba a pegar, quedarnos un rato ahi disfrutando de lo natural, y después volver al hotel para que nos termine de subir ahí por si las dudas, ya que desconocíamos el tipo de viaje que podía ser y mejor estar resguardados en la comodidad del hotel. Eso fue el plan inicial claro, pero al final nos salió todo al revés.
Para las 12:45 que salimos del hotel yo ya estaba en pleno extasis, los colores hiper brillantes y una sensación de tranquilidad que no puedo describir. En la orilla nos cagamos de risa un rato, disfrutamos los flashes visuales y lo colorido de la experiencia, a todo esto se hicieron las 2 y pico de la tarde, la arena ya nos estaba rompiendo un poco las bolas asi que decidimos volver al hotel, pero en cuanto nos paramos los tres nos dimos cuenta que ninguno se acordaba cómo volver al hotel. Empezamos a paniquear un rato, nos intentamos tranquilizar entre los tres pero lamentablemente ya habiamos aceptado que no ibamos a poder volver al hotel. Frente a esa playa habia una plaza, decidimos sentarnos en el pasto que era más comodo que estar en la arena, y simplemente dejar que los hongos sigan haciendo lo suyo. Básicamente aceptamos nuestro destino jaja.
No quiero ahondar mucho en el viaje en sí porque cada experiencia es única y tampoco encuentro las palabras para describir con exactitud lo que experimenté. A grandes rasgos puedo decir que el viaje me permitió analizar desde un punto de vista totalmente objetivo alguno de mis vinculos con ciertos familiares o amigos, lo que a su vez me permitió revivir recuerdos de mi infancia que había olvidado por completo. Sentí un miedo que me congeló todo el cuerpo cuando me di cuenta que lentamente estaba olvidando quien era yo, al punto que había olvidado donde estaba, cuál era mi propósito ahi, y eran tantos los flashes visuales y mi cerebro estaba siendo tan bombardeado por todo tipo de sensaciones que también había olvidado qué era yo, el concepto de ser un ser humano, y no recordaba absolutamente nada de cómo era mi realidad antes de ese punto. Lentamente sentía cómo perdía la cordura, tenía una sensación de angustia enorme porque sentía que algo estaba mal, pero no sabía qué era porque ya ni recordaba lo que alguna vez fui. A todo esto cabe aclarar que habían intervalos donde volvía a "la realidad" y podía interactuar con mis amigos (ellos estando en un estado similar al mío), intervalos donde sentía una felicidad enorme; y otros intervalos donde todo se volvia negro y de nuevo sentía esa angustia y terror que todavía me congelan cuando me acuerdo.
Para ir cerrando ésta experiencia, alrededor de las 16:30/17 hs pude "bajar", más que nada porque uno de mis amigos me empezó a rescatar para que lo ayude a rescatar al tercero que estaba totalmente ido y revolcandose en el piso. Recuerden que todo esto pasó en plena tarde en una plaza frente a la playa, de más está decir que muchisima gente nos vió retorciendonos bajo el Sol, asi que de yapa nos quedó la sensación de ridículo que habremos hecho. Recién tipo 18 pudimos volver al hotel, en medio del éxtasis se ve que habíamos caminado mucho porque nos caímos de culo cuando nos dimos cuenta que estabamos como a 15 cuadras cuando estabamos convencidos que habian sido dos,
Segunda Experiencia
Esta la hice éste sábado que pasó, fui con otros dos amigos a Ranchos a pasar el finde a la casa del hermano de uno de ellos que justo se había ido de vacaciones.
Los tres consumimos 1.5 g a eso de las 11 de la mañana, también en ayunas. Quise comer menos porque intuía que la intensidad de la vez anterior fue por la cantidad. También los consumimos con dulce de leche, ésta vez costó un poco más porque ya le tomé idea al ddl pero igual se dejaron comer.
A los 15 minutos ya estaba sintiendo esa sensación de felicidad y tranquilidad tan característica, y 10 minutos después de eso ya estaba a full con las alucinaciones visuales, superficies que respiran, colores hiper brillantes, distorsión en formas y tamaños, etc. Como estabamos en una zona rural mis amigos decidieron ir a caminar un rato en lo que se incrementaba el efecto, en mi caso decidií quedarme en la casa por si me pasaba como la vez anterior que olvidaba como volver, y de paso quería experimentarlo un poco en soledad.
Me tiré en el sillón, y se me ocurrió ver cómo podía ser el viaje con música asi que conecté mi celular a un parlante, elegi un album y dejé que todo pasara. A todo esto las alucinaciones visuales se intensificaban cada vez más, tuve muchos intervalos donde podía ver cómo la música entraba en mi cuerpo, y otros donde me perdía en mis pensamientos pero por suerte a diferencia de la primera vez, en ésta ocasión en ningún momento me olvidé de quien era yo o qué estaba haciendo ahí asi que pude sacarme a mi mismo cada vez que sentía que los pensamientos me estaban llenando de oscuridad y angustia. En los intervalos donde prestaba más atención a la música, la experimenté de una forma que no la había vivido antes. Podía diferencias cada instrumento, cada vez que la cantante armonizaba con distintas voces, cada detalle de producción, fue realmente una experiencia hermosa. El álbum que elegí es Froot de Marina and the Diamonds, más que nada porque es uno de mis discos favoritos, pero a la vez porque es un disco que tiene una producción sumamente detallista y cada canción es muy diferente de la otra, asi que supuse cada vez que cambiaba de canción iba a sentir emociones totalmente diferentes, y no me equivoqué. Recomiendo absolutamente tambien este album jaja.
A eso de las 17 hs los otros dos se me sumaron, decidimos comer 0.5 g más para cerrar. Los flashes visuales que en ese momentoe estaban desapareciendo se intensificaron casi al instante, y a los 15 minutos mi cuerpo se volvió a llenar de felicidad, tranquilidad, paz, y demás sensaciones lindas, y por alguna razón sentí la seguridad para fumar un poco de porro (hasta ese momento había evitado mezclar las drogas por si las dudas), lo cual fue una buena decisión porque fue un subidón de felicidad. Y por suerte fue así hasta las 21 que fue cuando sentí que ya estaba volviendo a la normalidad, todo el último tramo del viaje fue felicidad pura más que nada, acompañado por un set de Tale Of Us que realmente fue el que dirigió esa ultima etapa de la experiencia.
Poco más que agregar, la hice muy extensa perdón. Por suerte pude sacarme un poco el miedo que me quedó de la primer experiencia con ésta última, pero como moraleja dejaría que son algo totalmente impredecible, y que es muy importante priorizar tu comodidad a la hora de consumirlos, no como hicimos nosotros que por confiar fuimos un rato a la playa y de repente ya no podiamos volver.
Como a todo hay que tenerle mucho respeto, y la verdad por lo que leí y mi propia experiencia hasta ahora intuyo que la parte negativa y oscura del mambo es algo inevitable por más que tengas toda la contención del mundo, pero es solo parte de toda la experiencia y para mi lo vale absolutamente por todo el resto. Me cuesta expresar con palabras todo lo que vivií, todo lo que ví, lo que sentí o incluso las cosas que aprendí en los dos viajes. Te abren una puerta de autodescubrimiento y te desbloquean una especie de hiperconsciencia que te habilita una infinidad de perspectivas respecto a TODO, realmente es una experiencia única. Pero lo que tiene de única lo tiene de intensa, eso sí.
Gracias si se tomaron la molestia de leer hasta acá, la hice re larga jaja
Dudaba de si hacer éste tema o no, pero la verdad no pierdo nada y me gustaría compartirlo. Básicamente voy a detallar mi primer y segunda experiencia consumiendo hongos alucinogenos.
Primero que nada quiero aclarar que para ambas experiencias consumí hongos de la misma cosecha, por lo que la diferencia entre ambos viajes es exclusivamente por el contexto y la cantidad consumida.
Primer Experiencia
Junto a dos amigos nos fuimos a Mar del Plata por el fin de semana, dos de nosotros llegamos el viernes a la mañana pero como el otro llegaba recién a la noche, quedamos en hacerlo al otro día que estabamos los tres en igualdad de condiciones.
Decidimos hacerlo el sábado al mediodía, en ayunas. Yo había consumido hongos en una ocasión, si bien esa vez no tuve ningun tipo de efecto, conocía a la perfección el sabor de mierda que tienen así que se nos ocurrió consumirlos con dulce de leche para pasar el mal sabor. Básicamente eran cucharadones de dulce de leche (La Serenisima Estilo Colonial, obvio) con pedazos de hongos en el medio, y tengo que reconocer que fue bastante digerible eh. Poco se puede hacer con la textura acartonada que tienen, pero en lo que respecta a sabor el dulce de leche lo tapa casi en un 90% asi que a los que estén leyendo se los recomiendo absolutamente.
Consumimos 2g de una aproximadamente a las 12:15 hs dentro del hotel, la idea era ir a la playa en lo que empezaba a pegar, quedarnos un rato ahi disfrutando de lo natural, y después volver al hotel para que nos termine de subir ahí por si las dudas, ya que desconocíamos el tipo de viaje que podía ser y mejor estar resguardados en la comodidad del hotel. Eso fue el plan inicial claro, pero al final nos salió todo al revés.
Para las 12:45 que salimos del hotel yo ya estaba en pleno extasis, los colores hiper brillantes y una sensación de tranquilidad que no puedo describir. En la orilla nos cagamos de risa un rato, disfrutamos los flashes visuales y lo colorido de la experiencia, a todo esto se hicieron las 2 y pico de la tarde, la arena ya nos estaba rompiendo un poco las bolas asi que decidimos volver al hotel, pero en cuanto nos paramos los tres nos dimos cuenta que ninguno se acordaba cómo volver al hotel. Empezamos a paniquear un rato, nos intentamos tranquilizar entre los tres pero lamentablemente ya habiamos aceptado que no ibamos a poder volver al hotel. Frente a esa playa habia una plaza, decidimos sentarnos en el pasto que era más comodo que estar en la arena, y simplemente dejar que los hongos sigan haciendo lo suyo. Básicamente aceptamos nuestro destino jaja.
No quiero ahondar mucho en el viaje en sí porque cada experiencia es única y tampoco encuentro las palabras para describir con exactitud lo que experimenté. A grandes rasgos puedo decir que el viaje me permitió analizar desde un punto de vista totalmente objetivo alguno de mis vinculos con ciertos familiares o amigos, lo que a su vez me permitió revivir recuerdos de mi infancia que había olvidado por completo. Sentí un miedo que me congeló todo el cuerpo cuando me di cuenta que lentamente estaba olvidando quien era yo, al punto que había olvidado donde estaba, cuál era mi propósito ahi, y eran tantos los flashes visuales y mi cerebro estaba siendo tan bombardeado por todo tipo de sensaciones que también había olvidado qué era yo, el concepto de ser un ser humano, y no recordaba absolutamente nada de cómo era mi realidad antes de ese punto. Lentamente sentía cómo perdía la cordura, tenía una sensación de angustia enorme porque sentía que algo estaba mal, pero no sabía qué era porque ya ni recordaba lo que alguna vez fui. A todo esto cabe aclarar que habían intervalos donde volvía a "la realidad" y podía interactuar con mis amigos (ellos estando en un estado similar al mío), intervalos donde sentía una felicidad enorme; y otros intervalos donde todo se volvia negro y de nuevo sentía esa angustia y terror que todavía me congelan cuando me acuerdo.
Para ir cerrando ésta experiencia, alrededor de las 16:30/17 hs pude "bajar", más que nada porque uno de mis amigos me empezó a rescatar para que lo ayude a rescatar al tercero que estaba totalmente ido y revolcandose en el piso. Recuerden que todo esto pasó en plena tarde en una plaza frente a la playa, de más está decir que muchisima gente nos vió retorciendonos bajo el Sol, asi que de yapa nos quedó la sensación de ridículo que habremos hecho. Recién tipo 18 pudimos volver al hotel, en medio del éxtasis se ve que habíamos caminado mucho porque nos caímos de culo cuando nos dimos cuenta que estabamos como a 15 cuadras cuando estabamos convencidos que habian sido dos,
Segunda Experiencia
Esta la hice éste sábado que pasó, fui con otros dos amigos a Ranchos a pasar el finde a la casa del hermano de uno de ellos que justo se había ido de vacaciones.
Los tres consumimos 1.5 g a eso de las 11 de la mañana, también en ayunas. Quise comer menos porque intuía que la intensidad de la vez anterior fue por la cantidad. También los consumimos con dulce de leche, ésta vez costó un poco más porque ya le tomé idea al ddl pero igual se dejaron comer.
A los 15 minutos ya estaba sintiendo esa sensación de felicidad y tranquilidad tan característica, y 10 minutos después de eso ya estaba a full con las alucinaciones visuales, superficies que respiran, colores hiper brillantes, distorsión en formas y tamaños, etc. Como estabamos en una zona rural mis amigos decidieron ir a caminar un rato en lo que se incrementaba el efecto, en mi caso decidií quedarme en la casa por si me pasaba como la vez anterior que olvidaba como volver, y de paso quería experimentarlo un poco en soledad.
Me tiré en el sillón, y se me ocurrió ver cómo podía ser el viaje con música asi que conecté mi celular a un parlante, elegi un album y dejé que todo pasara. A todo esto las alucinaciones visuales se intensificaban cada vez más, tuve muchos intervalos donde podía ver cómo la música entraba en mi cuerpo, y otros donde me perdía en mis pensamientos pero por suerte a diferencia de la primera vez, en ésta ocasión en ningún momento me olvidé de quien era yo o qué estaba haciendo ahí asi que pude sacarme a mi mismo cada vez que sentía que los pensamientos me estaban llenando de oscuridad y angustia. En los intervalos donde prestaba más atención a la música, la experimenté de una forma que no la había vivido antes. Podía diferencias cada instrumento, cada vez que la cantante armonizaba con distintas voces, cada detalle de producción, fue realmente una experiencia hermosa. El álbum que elegí es Froot de Marina and the Diamonds, más que nada porque es uno de mis discos favoritos, pero a la vez porque es un disco que tiene una producción sumamente detallista y cada canción es muy diferente de la otra, asi que supuse cada vez que cambiaba de canción iba a sentir emociones totalmente diferentes, y no me equivoqué. Recomiendo absolutamente tambien este album jaja.
A eso de las 17 hs los otros dos se me sumaron, decidimos comer 0.5 g más para cerrar. Los flashes visuales que en ese momentoe estaban desapareciendo se intensificaron casi al instante, y a los 15 minutos mi cuerpo se volvió a llenar de felicidad, tranquilidad, paz, y demás sensaciones lindas, y por alguna razón sentí la seguridad para fumar un poco de porro (hasta ese momento había evitado mezclar las drogas por si las dudas), lo cual fue una buena decisión porque fue un subidón de felicidad. Y por suerte fue así hasta las 21 que fue cuando sentí que ya estaba volviendo a la normalidad, todo el último tramo del viaje fue felicidad pura más que nada, acompañado por un set de Tale Of Us que realmente fue el que dirigió esa ultima etapa de la experiencia.
Poco más que agregar, la hice muy extensa perdón. Por suerte pude sacarme un poco el miedo que me quedó de la primer experiencia con ésta última, pero como moraleja dejaría que son algo totalmente impredecible, y que es muy importante priorizar tu comodidad a la hora de consumirlos, no como hicimos nosotros que por confiar fuimos un rato a la playa y de repente ya no podiamos volver.
Como a todo hay que tenerle mucho respeto, y la verdad por lo que leí y mi propia experiencia hasta ahora intuyo que la parte negativa y oscura del mambo es algo inevitable por más que tengas toda la contención del mundo, pero es solo parte de toda la experiencia y para mi lo vale absolutamente por todo el resto. Me cuesta expresar con palabras todo lo que vivií, todo lo que ví, lo que sentí o incluso las cosas que aprendí en los dos viajes. Te abren una puerta de autodescubrimiento y te desbloquean una especie de hiperconsciencia que te habilita una infinidad de perspectivas respecto a TODO, realmente es una experiencia única. Pero lo que tiene de única lo tiene de intensa, eso sí.
Gracias si se tomaron la molestia de leer hasta acá, la hice re larga jaja