09-03-2022, 12:52 PM
(Última modificación: 09-03-2022, 04:13 PM por soulnmagic.)
Empecé a tomar alcohol a mis 15, muy tranqui. Para mis 19 creo que habré empezado con las noches de tequilazos y alguna que otra madrugada quebrando.
Pero jamás llegué al coma etilico ni se me apagó la Tele. Una sola vez me costó recordar una partecita de una noche, pero cuando mis amigos me contaron, vi todo clarísimo.
Me acuerdo que en mi fiesta de egresados de la secundaria, con todo el descontrol que trae, estaba bastante ebria... pero lo bastante lúcida como para escaparme de una situación de posible abuso (el dueño del boliche me había escondido una botella que yo llevé para la previa, y me dijo tipo 6 AM que vayamos a su oficina a tomar). De alguna forma escapé de esa escena.
Años después recuerdo que una noche me ofrecieron guita para un garche y manejé muy bien la situación. También estuve a un pelo de terminar enfiestada (wtf autocorrector) con dos tipos random, y los corté en menos 10 como una lady. En fin, me veían tan ebria siempre que sé que creían que me podían hacer cualquier cosa y creo que me quedó la alarmita encendida el resto de mi vida, como para poder disfrutar del alcohol sin llegar al punto de que alguien pudiera, aunque intentase, pasarse de vivo conmigo.
Fuera de eso, tomaba un montón, me divertí, lloré, bailé, peleé, garché, hice desastres... He vomitado por la ventanilla de un taxi y mi viejo se cansó de verme verme pedo a las 10 de la mañana (sin exagerar). Creo que terminó siendo un acompañamiento/multiplicador/detonante del quilombo hormonal que era (y éramos todos) en ese momento.
En fin, empecé a alejarme del alcohol a mis veintitantos, por patadas al hígado y otras señales del cuerpito. Hoy tomo vinito y con una copa ya estoy para mimir, y algún que otro trago ocasionalmente.
No tengo contacto con adolescentes en espacios informales. No sé qué piensan ni cómo lo viven. Calculo que estarán haciendo las mismas boludeces que hacia yo, en un nuevo contexto.
Solo espero que se cuiden. Especialmente las pibas.
Pero jamás llegué al coma etilico ni se me apagó la Tele. Una sola vez me costó recordar una partecita de una noche, pero cuando mis amigos me contaron, vi todo clarísimo.
Me acuerdo que en mi fiesta de egresados de la secundaria, con todo el descontrol que trae, estaba bastante ebria... pero lo bastante lúcida como para escaparme de una situación de posible abuso (el dueño del boliche me había escondido una botella que yo llevé para la previa, y me dijo tipo 6 AM que vayamos a su oficina a tomar). De alguna forma escapé de esa escena.
Años después recuerdo que una noche me ofrecieron guita para un garche y manejé muy bien la situación. También estuve a un pelo de terminar enfiestada (wtf autocorrector) con dos tipos random, y los corté en menos 10 como una lady. En fin, me veían tan ebria siempre que sé que creían que me podían hacer cualquier cosa y creo que me quedó la alarmita encendida el resto de mi vida, como para poder disfrutar del alcohol sin llegar al punto de que alguien pudiera, aunque intentase, pasarse de vivo conmigo.
Fuera de eso, tomaba un montón, me divertí, lloré, bailé, peleé, garché, hice desastres... He vomitado por la ventanilla de un taxi y mi viejo se cansó de verme verme pedo a las 10 de la mañana (sin exagerar). Creo que terminó siendo un acompañamiento/multiplicador/detonante del quilombo hormonal que era (y éramos todos) en ese momento.
En fin, empecé a alejarme del alcohol a mis veintitantos, por patadas al hígado y otras señales del cuerpito. Hoy tomo vinito y con una copa ya estoy para mimir, y algún que otro trago ocasionalmente.
No tengo contacto con adolescentes en espacios informales. No sé qué piensan ni cómo lo viven. Calculo que estarán haciendo las mismas boludeces que hacia yo, en un nuevo contexto.
Solo espero que se cuiden. Especialmente las pibas.